A mi AmigUchy!

U,
Mirando estas fotos se me vinieron tantas cosas a la cabeza!...

“La mamadera”, todos esos viajes a MDQ! en los que siempre compartimos la camucha y nunca te dejás! … Tantas películas compartidas en casa, en el cine y en nuestras capochas maquineras, American Pie y “mascarita”, Puán, las veces que me asististe en mis estados de ebriedad históricos… te acordás cuando estuviste a segundos de ser vomitada en ese bar?!, “perdoname que sea tu prima pero…”, la fiesta china, mi llanto en la terminal cuando pensé que eso no sólo era una vuelta temprana a Buenos Aires (y por suerte me equivoqué), mi desmayo en el recital de Miranda! y mi casi desmayo en el de Bandana (chan!), nuestro abrazo de alivio tiradas en el baño, verte con Luchi tratándote de peinar frente a un espejo cuando no te podías mantener en pie (pero siempre hay que conservar el glamour), ese boliche de Avellaneda donde los asistentes no reunían entre todos una dentadura completa y tus sandalias Melissa que se daban vuelta mientras caminabas, lo rompe y quejosa que te pusiste cuando nos insolamos (como si soportar mi quemadura no fuera castigo suficiente!... nunu había que bancarte a vos, salir a robar aloe vera y caminar bajo el sol del mediodía para conseguir rabas), llorar abrazándome desconsolada sólo por verme a mí con el corazón en mil partes, el susto que me hiciste pegar cuando me despertaste a las 4 de la madrugada diciéndome que había un ladrón en el patio y yo con ese palo a los gritos (siempre fui la valiente de las dos), “la gran Rosa de Lejos”, la felicidad del día en que ganamos $200 en el casino apostando $10, nuestras grandes sesiones de estudio de contabilidad en el Mc Donalds de Carrefour y vos secándote el pelo con el secador de manos del baño, dos coca light y hielo, vos pegándote con la gotita los zapatos antes de entrar a Frere tras la cara de espanto del vendedor de Farmacity, las corridas al hospital con Giselle desangrándose y viéndose esfumar los ahorros de monedas para tu regalo, uh y las corridas en taxi porque alguna no llegaba al baño! Ja!... las veces que me soportaste contándote los capítulos enteros de Buffy y haciendo que te interesaba, la gran fiesta del Milenio en lo de Laura (?), mis pedalines infaltables de Navidad y Año Nuevo, “Senillosa, Santander, Inclan”, hacer trampa en los jueguitos adentro de la máquina de básquet para terminar canjeando 50000 cupones por unos stickers de Winnie Pooh que obvio te quedaste vos (siempre fuiste una ventajera), las vueltas en los trencitos marplatenses, “dame tu maní, dame tu maní”, entregarle nuestros corazones a D´Alessandro, correr desaforadas para tocar madera y terminar abrazadas a los árboles frente a la mirada desorbitada de los transeúntes, “la esperanza es lo anteúltimo que se pierde, todavía te queda para perder la dignidad”, las porquerías del Outlet de Kosiuko, las picadas de Manolo, las parrilladas del Metro, las meriendas caribeñas de Magno, las medialunas de Atalaya y las hamburguesas de Burguer en Nuestra mesa, el día que nos robaron en la calle y no le dabas importancia pensando que nos estaban pidiendo una moneda (y los sándwiches de miga que nos comimos angustiadas con los últimos $20 que nos quedaron), abrirte siempre la mayonesa con los dientes porque están caros che!, el correo de las hadas, el karaoke loco en La Clínica, el culo de Diva, “disculpame, la cartera que te estás robando es mía”, los mates vomitivos (dulces y lavados) que he tenido que soportar, los italianos mirones con los que terminamos saliendo, Jenny from the block, el mal humor con el que te levantabas (sí ya sé lo que estás pensando: “he mejorado con los años”… y te doy la razón), las sesiones esotéricas, “si “x” pudo, nosotras podemos” (más les vale que se toquen una teta porque "x" es yeta.. seguro que te estás tocando U), nuestros grandes proyectos de vida compartidos (especialmente el de ir al carnaval de Gualeguaychú cuando cumplamos 50), los chapuzones en “el triangulito” cuando empieza a oscurecer, invocar nombres de extraños en la puerta de los boliches que nos han abierto las puertas al cielo, el flash (y orgullo) de verte recibida, "you are, you are sexy sexy sexy", el pantalón blanco de Ona (me ahorro la historia... ja)…
Ay! amiguchy se me vienen tantos recuerdos que no me alcanzaría el blog… y siempre al lado mío escuchándome, apoyándome, preocupándote, cuidándome, destornillándonos de risa o llorando desconsoladas… Siempre ahí… Como suelo decir: si hay alguna parte de mi biografía que yo omito o no recuerdo estás vos para completarla.
Gracias por tantos años de amistad, por tantas historias compartidas, por conocerme como nadie, por sentirte incondicional (a pesar de que algunas veces necesito correrme un poquito y sé que lo entendés), por ser mi sostén cuando parece que me voy a caer, mi compañera de emociones, de aventuras y desventuras.

Porque el tiempo pasa y vos seguís ahí... Siempre con tu glamour y mi bizarrada... Que no se corte!

Qué te puedo decir?! Dos palabras: Te amo!!!

Mariuchy

Pd 1: Te querés casar conmigo? Ja... Ya te advertí que no me rechazaras en público!

Pd 2: No sé si habrás notado que incluí en el collage de fotos al infaltable Leito... El peluche con forma de "soret..to" merece un capítulo a parte en el blog que algún día le dedicaré.